Desde la noche de los tiempos



En el antiguo Egipto se desarrolló un sistema de medición del tiempo para los periodos nocturnos, en ese momento en el que el reloj de sol perdía su utilidad al ocultarse éste en el horizonte. Consistía, en su forma más básica, en una vasija o recipiente con varias marcas en sus paredes y un orificio en su base, se llenaba de agua y dependiendo del diámetro del orificio el agua salía con mayor o menor fluidez, conforme iba vaciándose a lo largo de la noche iba dejando al descubierto las marcas, estableciendo así los tiempos nocturnos. Había nacido La Clepsidra, palabra que proviene de la griega klepsydra, klepto (robo) hydro (agua), el ladrón de agua.

Las palabras son como gotas de esa clepsidra que miden el tiempo en pasado, presente y futuro, tengo mi recipiente lleno de esas palabras que esperan fluir lentamente como una gota de tiempo en el océano para finalmente convertirme en un ladrón de tiempo, tu tiempo.


sábado, 23 de septiembre de 2017

Algo que decir


Un poco ya harto de todo y pensando cómo cuesta hablar de sentimientos y flores en un mundo dominado por un odio ancestral… pincho en Google Earth y a la vez que se abre el programa pienso, que mientras los trogloditas sigan instalados en el poder, las calles seguirán llenándose de banderas en vez de palabras,  los bandos seguirán buscando mártires para sus causas rancias y añejas, sangre que haga arder los corazones en estado de hibernación inducida, sólo el miedo a ser los primeros es lo que los frena.

Resulta que en milenios nada hemos aprendido, seguimos instalando fronteras geopolíticas, económicas y religiosas, en vez de dedicarnos a derribarlas con las armas de la solidaridad, el respeto a la singularidad y el amor al prójimo.  

Pincho de nuevo en Google Earth y sigo jugando con esa pelotita azul a la que le doy vueltas, de arriba abajo, de abajo arriba, en un fondo negro salpicado de puntitos que simulan planetas y estrellas, veo una masa nubosa que entiendo debe ser el brazo de esta nuestra galaxia en la que vivimos. Ahora Corea del Norte es Corea del Sur, Catalunya está en el oeste y bocabajo.  Méjico está en el norte y EEUU al sur, pero desgraciadamente los angelitos negros de Machín siguen yendo en patera, aunque sea desde el norte hacia el sur,  en busca de mejores condiciones de vida.
Todo es relativo, ya lo decía Einstein.

Texto by Johnny -Foto Google Earth
 

1 comentario:

anda ponme argo aquí